Inteligencia Artificial y comercio electrónico: un dúo ganador
La Inteligencia Artificial ya no es un concepto futurista para el comercio electrónico actual y los comerciantes electrónicos lo conocen ampliamente.

Sujeto ineludible, la Inteligencia Artificial (IA) está en los titulares. La mayoría de los actores económicos lo toman de frente y, por supuesto, el comercio electrónico no es una excepción a la regla.

Pero más allá del universo a veces complejo de los algoritmos, existe una realidad concreta y muchas soluciones técnicas basadas en la IA.

La IA está al servicio de la satisfacción de los usuarios de Internet, una satisfacción que genera rendimiento de forma natural.

Desmitifiquemos la Inteligencia Artificial

Seamos claros: la IA a menudo se malinterpreta y todavía se sigue haciendo. La propia noción de inteligencia suscita interminables debates en cuanto al término «artificial» ¿debemos entender que se refiere indirectamente a aspectos tecnológicos?

Nuestro propósito aquí no es alimentar el debate, sino ofrecer un enfoque pragmático y, sobre todo, centrarnos en los aspectos prácticos aplicados al e-Commerce.

En lugar de hablar de Inteligencia Artificial, preferimos hablar de Big Data y algoritmos. Cuando hablamos de algoritmos, estamos hablando de modelos estadísticos. La IA es, por tanto, un medio para hacer predicciones sobre una base racional con una fiabilidad mucho mayor que la que podría hacer individualmente un ser humano cuyas capacidades cognitivas son naturalmente limitadas.

Yann Le Cun, director de Inteligencia Artificial de Facebook, define la ‘AI como » un conjunto de técnicas que permiten a las máquinas realizar tareas y resolver problemas normalmente reservados para los humanos».

En otras palabras, la IA resulta ser una forma de tecnología en la que podremos confiar matemáticamente para superar nuestros límites con el fin de prever y anticiparnos mejor a nuestros problemas diarios y, en lo que a nosotros respecta, una forma de mejorar considerablemente el comercio online.

La Inteligencia Artificial ya no es un concepto futurista para el comercio electrónico actual y los comerciantes electrónicos lo conocen ampliamente.

Los que dedican al comercio electrónico tienen preguntas muy concretas: ¿qué herramientas utilizar para mejorar la venta sugerente? ¿Cómo hacer pruebas para optimizar su e-merchandising? ¿Cómo controlar sus precios en todos los canales de marketing web cuando distribuye feeds de productos de miles de referencias? ¿Cómo optimizar automáticamente su presencia en los mercados? ¿Cómo automatizar las acciones de SEO que consumen mucho tiempo?

En resumen, ¿cómo le permitirán los algoritmos ajustar su oferta y el contenido de su sitio de acuerdo con las necesidades de sus diferentes objetivos?

Los comerciantes desean brindar a sus visitantes una experiencia de visualización óptima y permitirles encontrar productos que cumplan con sus expectativas lo más rápido posible.

Tomemos un ejemplo evocador: un cliente del sitio de Pataugas quiere encontrar un nuevo par de zapatos. En esta etapa de la búsqueda, primero quiere hacer una búsqueda por color. Por lo tanto, naturalmente hará una solicitud con el término «negro» en la barra de búsqueda del sitio. El sistema le ofrecerá automáticamente un conjunto de productos.

Hasta entonces, algunos podrían decir que no hay nada excepcional y podrían preguntarse qué conexión hay en este ejemplo entre la Inteligencia Artificial y el trabajo de los algoritmos …

Aquí es donde el sistema es bastante sutil. De hecho, esta barra de búsqueda utiliza una solución basada en un algoritmo que presenta productos relevantes, sin que el usuario tenga que validar su búsqueda.

El algoritmo aprende del comportamiento de los usuarios y se adapta a sus necesidades para mejorar su proceso de compra. Es una herramienta potente, rápida e intuitiva que ayuda a los usuarios de Internet a encontrar un producto que cumpla con sus expectativas. De hecho, el sistema ha logrado «comprender» el tipo de producto que más probablemente interesará a este cliente.

La buena noticia es que este tipo de tecnología no es prerrogativa de los líderes del comercio electrónico ni de los gigantes de la industria como Amazon. Los comerciantes de todos los tamaños pueden aprovechar al máximo este tipo de tecnología para brindar a sus propios usuarios un sistema de recomendación basado en la personalización.

Por tanto, la personalización de los sitios de comercio electrónico gracias a la Inteligencia Artificial permitirá pasar gradualmente de la optimización de la experiencia del usuario a la optimización global del recorrido del cliente.

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